5 BODEGAS CON CAPIPOTA EN BARCELONA

Lo que empezó siendo cocina de aprovechamiento se ha convertido en todo un icono de la cocina catalana.

En Gelida llevan sirviendo capipota desde 1946. Suelta, picante y muy rica. Está a 4,90.

En Montferry, local heredero de la bodega original abierta en 1930 en el barrio de Sants, el protagonismo es para la picada, que deja una salsa espesa y potente. Está a 6,90.

Nos vamos a otro histórico, la Cova Fumada, que lleva desde 1946 triunfando en la Barceloneta. Su capipota también es suelta, de trozos menudos y con un buen punto picante. Está a 5,20

En la Bodega d’en Rafel, otra histórica fundada en 1935, sirven la más generosa, trozos toscos y gelatinosos, con protagonismo para el pimiento. Sergi, a pesar el gentío, estuvo muy atento.

Está a 5,45. Y, para acabar, la menos ortodoxa, la de la Bodega Can Ros, donde los callos son protagonistas desde hace más de 50 años. La salsa es espesa y es poco picante. El pan está muy rico y la sirven a 6,40. ¿Cuál os gusta más?

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